Aparte de los zoológicos del mundo, el único lugar donde viven los koalas es en Australia. Se sabe que la población restante es de 80 000 individuos aproximadamente, mucho menos de la mitad del número que existía años atrás. Las áreas alrededor de Australia donde viven los koalas son Nueva Gales del Sur, Queensland, Victoria y el sur de Australia.
Su gama se extiende desde la parte occidental de la meseta de Atherton en Cairns y también viven en las islas de la costa de Victoria. A menudo sólo los podemos ver en los árboles, pero puede suceder que bajen de ellos si necesitan buscar comida o para subirse a otros árboles. Usted podrá encontrarse grandes grupos de koalas unos cercanos a otros viviendo en los árboles, sin embargo se conoce que ellos tienden a aislarse la mayoría del tiempo.
Alrededor de los bordes exteriores de un grupo de koalas se encuentran los machos jóvenes, quienes permanecen allí con la esperanza de que un día puedan agregarse al grupo como miembros permanentes. Las hembras casi siempre son bien aceptadas por los machos pero frecuentemente tratan de evitar que más machos se acerquen por el riesgo de la competencia.
Lamentablemente más del 80% de la tierra que los koalas utilizan para moverse libremente ya ha sido destruido. Una gran parte de lo que queda es propiedad privada y las personas a menudo están ansiosas por despejar los árboles y usar el espacio para la agricultura. Ganarse su propia vida es más importante que lo que puedan hacer para conservar a los koalas que están delante de sus ojos.
En algunas áreas los cambios climáticos severos han derivado en condiciones de sequía. Como consecuencia los árboles de eucalipto no pueden ofrecer las hojas necesarias para que los koalas se alimenten, provocando que estos tengan que moverse hacia otras áreas. En estos casos no les es posible viajar largas distancias debido a la poca energía que obtienen de sus alimentos.
Al parecer a los koalas nacidos en cautiverio les va muy bien y se han hecho esfuerzos a través de programas para incrementar este número. Al mismo tiempo, el objetivo es encontrar vías para entenderlos mejor. Aun hay mucho que no conocemos acerca de estos animales. Tal vez si pudiéramos llenar los espacios en blanco, tendríamos la oportunidad de ayudarles a prosperar en lugar de estar en peligro de extinción.
La mayoría coincide en que los koalas requieren un bajo mantenimiento cuando están en cautiverio. Ellos no desarrollan altos niveles de estrés y son menos costosos de alimentar que la mayoría de los otros animales. Su comida tiene que ser importada desde Australia, aún así, comen pequeñas cantidades. Estos animales resultan muy atractivos, por lo que tenerlos en exhibición aumenta el número de visitantes anuales a cualquier entorno zoológico particular.
Una de las cosas más importantes al observar koalas en cautiverio es cuando empiezan a mostrar altos niveles de estrés. Esto puede ocurrir cuando la dinámica del grupo ha cambiado, cuando las hembras están por aparearse o dar a luz y si no pueden comer lo suficiente. Observar señales como la pérdida de peso y las enfermedades también es importante cuando los koalas viven en este tipo de hábitat controlado.
Por ejemplo para ayudarlos a protegerse contra las enfermedades, los koalas en cautiverio son vacunados y desparasitados anualmente. Es por ello que el promedio de vida en cautiverio es el doble de la vida koala en la naturaleza.